Cuando uno piensa en la cultura musulmana tiende a pensar erroneamente en personas violentas, agresivas, poco civilizadas. Nada más equivocado que eso. Viajando por Lombok, isla ubicada al este de Bali, tuve la suerte de conocer a gente muy amable y servicial. Es gracioso regresar cada temporada de olas y que niños, jovenes y adultos te saluden con una gran sonrisa en sus rostros.
Algunos como mi amigo Eddie, dueño de una de las pocas bodegas de la zona de Pelangang, acaba de tener una hija y apenas me ve le dice a su hijita ahi esta tu tio John. Creo que aca tengo más sobrinos que en la misma Lima, jajja. Definitivamente la vida en este lugar es muy tranquila, pueblerina. En las noches suenan los rezos por los parlantes y en las madrugadas el amanecer te lo anuncian los gallos al cantar La gente es muy espiritual con un gran sentido de la unidad familiar. La vegetación es abundante pero distinta a la de Bali. El clima es mas seco, el viento sopla más frio en las tardes. Sin embargo, el sol es mas fuerte y la temperatura del mar es bastante mas caliente. El mar es turquesa y puedes ver islas pequeñas por todos lados y playas totalmente deshabitadas. Este lugar debe ser uno de los pocos del mundo que se mantiene virgen y que el desarrollo es mínimo. Todo gira en función a la naturaleza, los cultivos, la pesca y para algunos el surf. Al dia siguiente de mi llegada me trepo al carro, cojo mis tablas y me enrumbo a la búsqueda de olas. En el transcurso veo mujeres cargando frutas, material de construcción o tejidos en sus cabezas. Niños que gritan Hello!!!!!!!! al verte como si fueras una especie de estrella de cine. La llegada del extranjero es vista gratamente. Los hombres en grupo fumando un cigarro, riendose con sus faldas y sombreros. Cientos de botes navegando a vela en busca de una buena pesca.
Llego a la rompiente y los locales me dicen: Ombak Besar Besok!!! Olas grandes mañana. Eso se puede constatar al instante, el mar es una taza de agua y el lugar está completamente desierto. Quien se puede imaginar que el dia siguiente cuando arribe la crecida van a haber cientos de personas de todas partes del mundo luchando para correr la ola soñada. El secreto de esta increible ola ya se perdio hace muchos años.
Sin embargo todo avance tiene efectos positivos y negativos. El gran cambio favorable de la inmigración surfer a este parte de la isla ha hecho que esa gente que antes no tenía que comer sea propietaria de puestos de comida, motos, ropa, etc. Un poco de desarrollo a una zona que hace no muy poco tenía niños con enfermedades graves como la malaria y pocos recursos para combatirla. La bahía del Sekotong es una de esas zonas en la que el tiempo no pasa, solo las carrozas con los caballos y uno que otro carro. Nada más cerca que la naturaleza misma y en mi humilde opinion una de las mejores olas que el surf mundial nos puede dar: Bangko – Bangko.
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